El presidente de la federación regional de taxis de Canarias pide reformas estructurales para actualizar periódicamente las tarifas.
El presidente de la federación regional de taxis de Canarias, Juan Artiles, afirma que, «por el momento» han logrado parar «los pies» a la entrada de la empresa Uber en el Archipiélago, y espera que en las distintas conversaciones con el Gobierno canario y el central, se puede llegar a una solución definitiva que evite el dominio del mercado por parte de esta multinacional: «Donde entra Uber no crece la hierba».
Sentencias a favor
Señala que han venido estudiando este asunto desde hace mucho tiempo y, desde el pasado mes de enero, con el informe del abogado de la Unión Europea han intensificado sus esfuerzos para estar preparados para la inminente sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Indica que algunos municipios de Tenerife han concedido a Ares Capital treinta licencias para una modalidad de transporte que no está relacionado con el servicio de taxis, sino con el alquiler de coches de alta gama con chófer. Artiles señala que hay distintas sentencias en la que les exige a Uber que trabajen conforme a la ley canaria: «En ese sentido hemos logrado pararles los pies».
Desmiente que haya taxistas trabajando con Uber, particularmente de alguna de las cuarenta asociaciones que reúne la federación regional de taxis de Canarias. Cosa distinta es que algunos taxistas se hayan registrado por curiosidad.
Los retos del taxi
Señala que, con independencia del reto que pueda suponer Uber, los taxistas canarios tienen que afrontar sus propios problemas. A este respecto, recuerda que son un servicio público impropio, en el sentido que son empresas privadas las que prestan el servicio por concesión municipal.
Indica que los taxistas no están en contra de las tarifas reguladas, pero en muchas situaciones no se actualizan conforme a la realidad de los gastos. Así sucede en Telde, Ingenio, Agüimes o Las Palmas de Gran Canaria. Esto se traduce en la falta de coches en circulación, porque los propietarios de los taxis no contratan más personal por los altos costes laborales: «Hay que ir a un sistema tarifario que se actualice periódicamente».