La vivienda colaborativa, un modelo para envejecer en comunidad y sin perder autonomía

Francisca Martín, coordinadora de la asociación Semilla del Norte, enfatiza que buscan una solución autogestionada, por lo que rehuyen modelos de mercado o de gestión pública.

El "cohousing" o vivienda colaborativa es una modalidad habitacional que pretende que colectivos de personas puedan envejecer en comunidad sin perder la autonomía de cada uno de ellos. Francisca Martín, coordinadora de la asociación Semilla del Norte, señala que a su organización pertenecen unas cuarenta personas, no todas ellas mayores, y lo que pretenden es crear estructuras habitacionales de uso personal combinadas con espacios comunes que permitan optimizar los recursos y garantizar la privacidad. 

Modelo de autogestión

La idea, señala, es dar a conocer la idea entre distintos municipios y cabildos, sin descartar la posibilidad de que pueda haber una cesión de terrenos por parte de un municipio. En cualquier caso, aspiran a la autogestión, evitando cualquier especulación de los terrenos o la administración pública de las colectividades. Asegura que uno de los grandes problemas es el del suelo, por ser caro y escaso en Canarias y sus necesidades apuntan a unos 6000 metros cuadrados, pues, para garantizar la accesibilidad, tratan de evitar la construcción en altura. Esperan ver realizadas sus aspiraciones y entrar a vivir en las viviendas en el año 2024.

Asambleario y democrático

La asociación está abierta y pretenden acceder al mayor número de personas, lo que permitiría proyectar distintas zonas de vivienda colaborativas. Además, afirma que "vivir en comunidad no es fácil" por lo que la pertenencia a la asociación permite que las personas que van a vivir juntas empiecen a conocerse. Señala que su funcionamiento es completamente asambleario y "democrático"