El retraso en los pagos, debido a la gestión de la intervención municipal, compromete la supervivencia de la empresa encargada del ciclo integral del agua.
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha abonado a la empresa Emalsa casi trece millones de euros en intereses de demora en los últimos años, a cuenta de las sentencias que la conmina a pagar las deudas acumuladas, que se acercan a los ochenta millones de euros.
Los contenciosos de la empresa con el Ayuntamiento son numerosos a cuenta de los 28,14 millones de deuda en alcantarillado entre 2013 y 2017. Se han abonado 27 millones, de los cuales 12,6 corresponden a intereses de demora, 1,02 millones en instalaciones, de los que quedan por pagar 300.000, o los 15 millones en lodos, de los que se han pagado poco más de once. Junto con la tasa de depuración, de 34,7 millones, la deuda alcanza cifras cercanas a los ochenta millones de euros.