Jaime Ospina, jefe de servicio de Cirugía Plástica y Estética de IKIGAI y HUSR en Las Palmas, recalca que está indicada para más del 80% de los pacientes que acuden a la consulta.
La liposucción asistida por potencia es una de las técnicas más modernas para la extracción de grasa, procurando una mayor precisión en el esculpido, según indica Jaime Ospina, jefe de servicio de Cirugía Plástica y Estética de IKIGAI y Hospitales Universitarios San Roque en Las Palmas de Gran Canaria,
La técnica se combina con los tratamientos de lipotransferencia, que permiten reutilizar en otras partes del cuerpo la grasa extraída. Para ser candidato o candidata a esta intervención, se requiere cumplir con dos requisitos: que el índice de masa corporal sea bajo y que la piel tenga buena calidad: “Es decir, el 80% de los pacientes que acuden a la consulta”. No se trata de una técnica ambulatoria, pues, para mayor seguridad y confort del paciente, se aplica anestesia general, en una operación que se extiende unas tres horas.
Cuidado de sí en pandemia
Ospina señala que durante la pandemia de la covid-19 se ha producido un incremento en la actividad de tratamientos y cirugías, debido a la demanda de personas que no han podido tomar vacaciones y así “hay más tiempo para dedicarse a sí misma”. Además, “antes del verano la gente se cuida un poco más”.