Aprovechando que el sábado 17 de junio se celebra el Día contra la desertificación y la sequía, la organización ecologista quiere llamar la atención sobre que España tiene cada vez menos agua.
La organización ecologistas Greenpeace alerta en un informe titulado «La burbuja del regadío en España» de los problemas de desertificación y sequía que viene sufriendo España. Señala que la ciencia advierte que nuestro país tendrá cada vez menos agua, mientras que los regadíos han aumentado un 16 por ciento.
En el informe se pone de relieve que aún con embalses al 47 por ciento, la planificación hidrológica para los próximos años recoge aumentos de regadíos en cuencas como Ebro, Duero, Guadiana o Segura. Asimismo, indica que el 16,2 por ciento del regadío está en zonas con acuíferos en mal estado o vulnerables a nitratos y un 3,7 por ciento de ese regadío está en zonas donde ya ha cambiado el clima.
«Tenemos agua escasa, contaminada y mal gestionada, algo que no nos podemos permitir y cada vez menos», señala el informe. Por ese motivo, dentro de su campaña “Salvar el Agua”, Greenpeace presenta el informe «La burbuja del regadío en España» con datos, elaborados por el Observatorio de la Sostenibilidad, que alertan sobre el regadío sobredimensionado de este país.
En poco más de una década, las reservas de agua superficiales han bajado unos 10 puntos porcentuales de media y seguirá disminuyendo, según apunta la ciencia, por los efectos del cambio climático. La fuente alternativa no pueden ser solo las aguas subterráneas, puesto que el 44 cierto ya están en mal estado y, las que quedan útiles, deben ser reservas de agua extremadamente bien gestionadas y controladas para el futuro. Por lo tanto, solo queda reducir el consumo. Teniendo en cuenta que casi el 80 % del consumo va a regadío, «parece evidente que es el primer sector con un recorte necesario».