Antonio Álvarez, director ejecutivo de la empresa Evosocial Soft, señala que el objetivo es la seguridad en el control de la pandemia y no la vigilancia.
La empresa canaria Evoscial Soft ha desarrollado una herramienta que combina cámaras de visión térmica y convencionales para, mediante inteligencia artificial, realizar lecturas térmicas de las personas y distinguir la utilización de mascarillas.
Utilizando proyectos ya en marcha de visión artificial, han conseguido crear un prototipo capaz de calcular la temperatura y avisar al propio afectado o a los encargados de un área para su supervisión. Estas aplicaciones serían de utilidad, señala Antonio Álvarez, en el marco de los puertos y aeropuertos, en hospitales, particularmente en los cribados de los servicios de urgencia, y en supermercados y establecimientos comerciales.
Entornos seguros, no carcelarios
La aplicación detecta la temperatura elevada o la ausencia de mascarilla y envía una alerta a los responsables para que se haga una segunda lectura o una comprobación física. Álvarez recalca que el sistema se utiliza para evitar la propagación, sin acumular datos de identidad de las personas: “Queremos evitar que las ciudades se conviertan en cárceles, pero que sean zonas seguras. A nadie le interesa que la covid campe a sus anchas”.